LIDERAZGO

El liderazgo es, en esencia, un atributo natural de ciertas personas; y lo es aún más selectivo en momentos de severa crisis. Todos somos, en alguna medida y en ciertos aspectos, líderes; pero pocos tenemos esa madera especial de la que están hechas aquellas personas destinadas a ponerle el pecho a circunstancias realmente extraordinarias y que, de un modo u otro, sacan lo mejor de sí mismos y logran guiar a un pueblo por la peligrosa senda que ello implica y... triunfar.

¡Y dejar su huella indeleble en la historia!

Una de las características de un lider con esa madera especial es que tienen una sobrenatural percepción del tiempo. No del tiempo lineal que nos atenaza, sino del tiempo histórico que define - para bien o para mal - el devenir de una nación o de la humanidad. Entienden de manera diáfana cuando hay que actuar, cuando escuchar y cuando luchar por sus convicciones y por el bien de su país o de nuestra especie.

Son capaces de arrastrar a todo un pueblo, incluyendo a los siempre consabidos opositores, por la senda que consideran, de forma absoluta, es la correcta. Tienen esa única percepción de sí mismos que los induce, inevitablemente, a tomar los riesgos inherentes a sus decisiones y... asumir la responsabilidad que ello implica. Y esa responsabilidad es inevitablemente atemporal.

Costa Rica ha tenido esa clase de líderes. Uno lo fue don Juanito Mora, otro lo fue el Dr. Calderón Guardia y, el epítome moderno de ese tipo de liderazgo, lo fue don José Figueres Ferrer. Ha habido otros... pero no de esa especial talla y naturaleza. Fueron líderes que marcaron, para siempre, el destino de nuestra Patria. Enfrentaron circunstancias muy difíciles y las superaron; y llevaron al país a cimas que hoy, con cierta nostalgia y envidia de la buena, vemos con no disimulado orgullo.

He tomado esos 3 ejemplos para recordar que, cuando las disyuntivas de nuestro país los puso en la difícil posición de decidir... NO PERDIERON tiempo en consultas interminables, ni en mesas de diálogo ciudadano ni en otras maromas distractoras y politiqueras.

¡Simplemente ACTUARON!

Uno nos salvó del colonialismo esclavista y nos dio el sentido de Estado nacional, el otro nos dio las Garantías Sociales, la UCR y nuestro Código de Trabajo y, el último, nos dio nuestra II República, nuestra actual Constitución Política, nuestra institucionalidad republicana, un país sin ejército y la convicción de que el desarrollo económico y el social son las dos caras de una misma moneda. Los 3 son pilares cimeros de nuestra historia patria.

Cierro este pequeño artículo con unas palabras de don Pepe que, definitivamente, tienen una resonancia trascendental en estos tiempos de angustiosa crisis que vive nuestra Costa Rica y que lo definen como el líder especial que fue:

“Las cosas imposibles para hacerlas posibles, lo que hay que hacer es HACERLAS”. (José Figueres Ferrer).

"El que tiene oídos, que escuche pues la historia - en los momentos cruciales - habla a gritos..." (MF)