NUNCA CALLARE MI OPINION

Pareciera, parafraseando al papa Pio X, que no hemos entendido que lo que está mal está mal aunque lo hagamos todos; y que lo que está bien está bien aunque NO lo haga nadie.


Me han indilgado, por la publicación que hice ayer sobre la decisión del Poder Judicial, que soy un "ignorante" porque divulgo y critico decisiones de nuestras más altas autoridades políticas, judiciales y hasta legislativas sin informarme. Que opino a la ligera e incito el descontento de quienes me leen porque no me informo de que, por ejemplo, lo decidido por el Poder Judicial está "totalmente a derecho"; y es el resultado de jurisprudencia por pronunciamientos de la Sala IV (parte INTERESADA) y de una "rígida" y "brillante" interpretación legalista por parte de la Corte Suprema de Justicia (parte INTERESADA también).


Pero... y a pesar de que entiendo perfectamente el trasfondo legal y constitucional, mis comentarios - al menos en los temas que se refieren a las excepciones a la Norma Fiscal que están alegando las universidades estatales, los sindicatos de la CCSS, las municipalidades y el Poder Judicial - NO CUESTIONAN el marco jurídico ni la legalidad de sus reclamos o decisiones (eso será dilucidado en otros estrados, lo cual me parece aberrante), sino que reclamo la falta de MORALIDAD de las mismas. Yo no creo que lo legalmente imposible sea también moralmente imposible. La legalidad NUNCA debe de ser esgrimida como justificación para autoflagelarnos como país al proteger abusos de otros o propios. La desobediencia ha sido el motor de las grandes transformaciones históricas tanto políticas, como sociales y económicas. La desobediencia - entendámonos - NO LA IRRESPONSABILIDAD.

Debo de hacer la salvedad con respecto a la reciente huelga de los sindicatos de salud por su vergonzosa y descarada muletilla de que la misma tenía como fin "defender la caja y evitar su privatización". Eso era una redomada MENTIRA y un VULGAR PANFLETERISMO. Ciertamente puedo ser ignorante, pero no soy tan bobo como para no darme cuenta de que tal afirmación era no solo falsa, sino constitucional y legalmente imposible sin una REFORMA CONSTITUCIONAL y una reforma profunda a la Ley fundadora de la CCSS. Y eso llevaría, en este país, años de años hacerlo. Ahí sí que critiqué y lo hice RELAMIÉNDOME con gusto porque, si algo detesto, es la manifiesta manipulación que los grupos de poder hacen de nosotros los ciudadanos comunes y corrientes un día si y el siguiente también. El fin real era, Y COMO HA SIDO DESDE YA HACE MÁS DE 3 DÉCADAS, proteger sus execrables abusos y pluses.

Pero, bueno... soy ciudadano nacido y creado en este extraordinario y bello país; y estoy sumamente preocupado por lo que ha venido sucediendo y por el peligrosísimo rumbo que hemos tomado, particularmente desde los inicios de este siglo XXI. Y puedo y debo expresar mi opinión. Es la única y mejor forma que tengo de luchar. Esa es mi trinchera.

¡Cómo si no tuviera la obligación y el derecho como ciudadano a criticar y externar mi opinión ante los patentes abusos a los que nos han sometido nuestras castas política/económica/judicial/fiscal/sindical por ya décadas! ¡Cómo si no tuviese derecho a denunciar, reclamar y criticar decisiones que eximen a la "aristocracia del sector público" (escudada en la masa de soldados carne de cañon que son la mayoría de los empleados públicos), mientras recargan prácticamente la totalidad del peso tributario sobre las espaldas del pueblo y del sector productivo! ¡Cómo si no tuviese derecho a exigir ética y moral en la función pública y en la administración del Estado en aras del "bien común" - que de común no tiene NADA - y no SOLO por el bien de grupos de interés que van desde los sindicatos hasta los pensionados de lujo, pasando por todas las cúpulas de las instituciones autónomas, semi-autónomas ya hasta del gobierno central!

La responsabilidad, el sacrificio y la solidaridad (todos conceptos QUE MARCAN Y DETERMINAN LA CONDUCTA MORAL) hace LUSTROS abandonó los olímpicos recintos de nuestra institucionalidad; y especialmente en estos tiempos de crisis que vive Costa Rica. Y ante semejante panorama, y a pesar de mi manifiesta ignorancia LEGALISTA - además de que ignoro demasiadas cosas como cualquier ser humano - NUNCA dejaré de opinar ni criticar y de comunicar por esta y otras vías mis opiniones, mis pensamientos y mis sugerencias (que también he hecho en múltiples oportunidades). Básteme, al final de cuentas, el hacer el esfuerzo para estar en paz con mi conciencia.

¡NUNCA!

Comments

Popular posts from this blog

CONFESIONES DE UN POLICIA MILITAR COSTARRICENSE

LA IMPORTANCIA DE LOS IMPUESTOS

¿CERRO DON JOSE MARIA FIGUERES EL FERROCARRIL?